A partir de este otoño, los pasajeros que lleguen al aeropuerto de Zúrich podrán ser objeto de un escaneo de rasgos faciales al atravesar el control de pasaportes. En la fase inicial, este procedimiento solo se aplicará a los viajeros que den su consentimiento.
Actualmente, el aeropuerto de Zúrich dispone de ocho equipos de escaneo que iniciarán operaciones el 27 de septiembre. Su doble objetivo es mejorar los niveles de seguridad, en beneficio de todos los pasajeros, y reducir las colas para cumplir con el requisito del control fronterizo.
El esperado sistema entrará en vigor con cierto retraso con respeto a lo previsto, reconocen las autoridades aeroportuarias. Inicialmente se preveía que estuviera listo a finales de agosto, pero hubo que realizar controles adicionales de “optimización de software”.
El periódico ‘Tages-Anzeiger’ informó hace unos días que la policía cantonal de Zúrich ya ha sido formada para utilizar el también conocido como sistema de Control Automatizado de Fronteras (ABC por sus siglas en inglés). Los responsables de su uso son conscientes de que recibirá el pistoletazo de salida en uno de los periodos del año con mayor tránsito, ya que por el aeropuerto de Zúrich puedan pasar unos 107 000 pasajeros diarios.
La policía cantonal y las autoridades aeroportuarias subrayan que, dado que se trata de un programa piloto, será un procedimiento totalmente voluntario durante los meses que dure la fase piloto. El sistema, idéntico al que se utiliza en aeropuertos como el de Ámsterdam Schiphol, solo escaneará los rasgos de quien esté de acuerdo con ello.
No más oficiales de control fronterizo
Los pasajeros mayores de 18 años que tengan un pasaporte biométrico y cuyo origen sea Suiza, la Unión Europea (UE) o el Espacio Económico Europeo (EEE) podrán utilizar este sofisticado escáner, en lugar de la fórmula tradicional de presentar sus documentos en el control de pasaportes.
El sistema de reconocimiento biométrico del rostro mide la distancia entre los ojos, la boca y otros rasgos faciales de las personas, ofreciendo una lectura única e irrepetible de cada individuo. Esta información provee a las autoridades de un país con nuevos medios de identificación personal, facilitando la tarea de detectar oportunamente terroristas o criminales, en general.
El sistema ABC también está diseñado para verificar la identidad de una persona a través de otros datos biométricos, como las huellas dactilares, por ejemplo. La policía de Zúrich se reserva el derecho a informar cuándo comenzará a detectar este tipo de información.
Si bien esta nueva tecnología de identificación biométrica supone un paso adelante en materia de seguridad y ahorro de tiempo en los trámites fronterizos, despierta inquietudes en más de uno, pues compromete la privacidad y protección de datos. Adrian Lobsiger, comisionado para la Protección de Datos de Suiza, asegura que esta complicación de datos biométricos es una “megatendencia” que se mantendrá.
La policía cantonal de Zúrich declinó hacer comentarios sobre la próxima puesta en marcha de este sistema de recolección de datos, pero asegura que habrá más información antes de finales de septiembre.
El de Zúrich es el aeropuerto más importante de Suiza, con un flujo de 27,7 millones de pasajeros en 2016.